no se necesita a Dios para levantar un nuevo edificio

ni para comprar un cartón de cervezas

con la edad necesaria

solo si la propiedad está está por caerse / o la resaca es severa 

es que se asoma Dios entre nosotros

la primera pregunta que hace Dios en la Biblia es:

¿dónde estás? (Gen 3:9)

pero si él lo sabe todo /

creo que la pregunto debió haber sido otra

siempre he querido un tostador antiguo

con paneles de lata brillantes

en los que pueda ver mi reflejo distorsionado

mientras espero a que los panes salten como truchas

pero esto es irrelevante

como cuando voy por la vereda jugando

a no pisar las líneas del pavimento

y me siento seguro de no perder /

o cometer un error que ya no pueda remediar

a veces todo es una variable tan predecible que sorprende

un día Charles Wells consiguió romper la banca del casino Monte Carlo

en once ocasiones lo dejó sin fondos /

ganó 23 veces en 30 apuestas sucesivas a la ruleta

se fue con un millón de francos

y con la sorpresa de los detectives del club

quienes no pudieron descubrir su método

asegurando de que se trataba de pura suerte

pero toda existencia es un lance de piedra / papel / o tijeras

y un año después regresó con más dinero

procedente de inversionistas

a los que había convencido de su buena estrella

ganó hasta en seis ocasiones / pero después / lo perdió todo

incapaz de pagar sus deudas

fue arrestado por estafa y condenado a 11 años de prisión

irónicamente murió en la pobreza / pero inspiró una canción /

un libro / una película

y ahora este poema

imagino que Dios / que siempre sabe en dónde estamos

se ríe mucho con todas estas cosas.